Liberalismo y cosmovisiones del mundo
Liberalismo y cosmovisiones del
mundo
En la teoría integral de Ken
Wilber, este recopila los descubrimientos de la psicología evolutiva, según los
cuales los seres humanos crecen desarrollando su conciencia por etapas. En cada
etapa de la conciencia en la que se encuentra cada individuo, este percibe el
mundo de manera diferente.
No entro en este texto a analizar
qué nivel de conciencia hace posible la cosmovisión liberal, ya que eso se
extendería demasiado para los fines que persigo aquí.
En cada cultura o sociedad,
diferentes individuos se encuentran en distintas etapas de la conciencia y, por
lo tanto, perciben el mundo de manera distinta.
Sin embargo, se podría decir que,
en cada cultura, hay visiones del mundo que predominan sobre otras, aunque haya
individuos que perciban el mundo de forma diferente a esa cosmovisión
predominante.
Hoy en día, en el mundo, podemos
afirmar que la cosmovisión predominante es el materialismo. Tanto en la ciencia
como en todos los órdenes de la vida, la cosmovisión subyacente en la que nos
desenvolvemos es materialista. La gran mayoría de las personas no vive
rechazando el cuerpo y el mundo en una especie de búsqueda religiosa o
intentando conectar con un mundo inmaterial fuera de los sentidos. Por otra
parte, las perspectivas científicas tienden a ser diferentes formas de afirmar
y experimentar con la materia, cuantificando datos y generando hipótesis.
Ahora bien, el liberalismo no es
una doctrina que nos indique qué fines deben perseguir los seres humanos. Solo
establece que, al perseguir nuestros fines, debemos evitar el uso de la fuerza
física contra el prójimo, respetando su vida y su propiedad. Fuera de esto,
cada persona debería tener la libertad de perseguir sus propios fines,
asumiendo la responsabilidad de sus acciones.
Por supuesto, el liberalismo es
una doctrina política “para este mundo”; no trata sobre espíritus ni otras
dimensiones. En ese sentido, tal vez alguien podría definirlo como
“materialista”. Pero se trata de un materialismo “minimalista”, ya que no se
pronuncia ni a favor ni en contra de los fines, sean materialistas o no, que
persigan los seres humanos.
De hecho, si pensamos en la
teoría económica de Ludwig von Mises, uno de los filósofos liberales más
destacados, vemos que su concepto de “Acción Humana” establece que las personas
se mueven persiguiendo fines y valoraciones subjetivas. Mises explica la
economía como el resultado de las acciones humanas basadas en preferencias
subjetivas, donde nos movemos valorando fines que consideramos más importantes
que otros.
Ahora bien, cada sujeto actuante
opera en su contexto de vida. Hace diez mil años, un individuo no podía pensar:
“Voy al supermercado a comprar comida”. Tal vez sus fines eran: “Debo salir a
cazar un animal” o algo similar.
A veces, hay quienes atacan al
liberalismo acusándolo de promover la búsqueda de beneficios económicos a toda
costa. Esta acusación es falsa por dos motivos. Como dijimos antes, el
liberalismo acepta que cada individuo siga sus propios fines, siempre y cuando
no viole los derechos de terceros. En segundo lugar, si las personas persiguen
principalmente fines económicos, en el sentido de querer aumentar su tenencia
de bienes y servicios o métodos cada vez más fantásticos para mejorar su salud
o su longevidad, eso se debe a que la cosmovisión materialista subyace en nuestro
contexto de vida. Si en algún momento esta cosmovisión cambiara, y las personas
comenzaran a buscar fines no materialistas, ya sean puramente religiosos o
espirituales, el liberalismo no tendría nada que objetar: simplemente el
mercado se adaptaría y reflejaría esta nueva manera de pensar humana.
En resumen, el liberalismo
promueve una conducta ética básica y sencilla que rija la interacción humana en
sociedad. No nos dice nada sobre los fines que los individuos deben perseguir.
Si consideramos que la cosmovisión materialista es equivocada o limitada, y que
tiene consecuencias negativas para la vida, debe buscarse la responsabilidad en
otro lugar, no en el liberalismo.
Fermín Garay
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